viernes, 30 de diciembre de 2011

Fin de año con... ¡premio!


No se puede concluir el año de mejor modo que con un premio. Mi micro-relato romántico PIDE UN DESEO ha sido seleccionado para formar parte de la antología CIEN MICRO-RELATOS DE AMOR Y UN DESEO SATISFECHO que en los próximos meses publicará Éride Ediciones.
Un libro que hará historia, ya que va a reunir en un mismo volumen a Noelia Amarillo, Olivia Ardey, Rosana Briel, Jezz Burning, Brianna Callum, Teresa Cameselle, Mar Carrión, Noe Casado, Anne Crosv, Kelly Dreams, Ana Fernández, Laura Frías, Menchu Garcerán, Ángeles Ibirika, Ana Iturgáiz, Amber Lake, Lydia Leyte, Bela Marbel, Megan Maxwell, Andrea Milano, Helena Nieto, M.D. Nika, Yolanda Quiralte, Ana Esmeralda Recuenco, Gema Samaro, Lucía de Vicente.... y así hasta 100 escritores.

Pero mi alegría es doble porque voy a compartir páginas con un montón de voces nuevas como son Marisa Arias López, Joanira Campagnuolo, Fany Costas, Merche Diolch, Hada Fitipaldi, María del Mar Giménez, Marta Hidalgo,  Victoria Hyde, Anna Karine, María José Losada, Chus Nevado, Laura Nuño, Trinidad Palacios, Hecate Selene, María Helena Tijeras, Mar Vaquerizo.... y muchos más.
¡No quiero olvidarme de nadie! De algunas he tenido la suerte de leer sus obras inéditas y por su buen hacer las admiro. A todas ellas les deseo de corazón que esta antología romántica sea el inicio de una exitosa carrera literaria.

Gracias, bibliotecas públicas


No quiero que acabe el año sin expresar mi agradecimiento a las Bibliotecas Públicas por su callada labor de fomento de la lectura. Un servicio gratuito, no olvidemos este dato tan importante en tiempos de crisis, que pone los libros, prensa y material audiovisual al alcance de todos.
Hoy mismo me escribía Judit Ruiz, lectora entusiasta a la que como escritora deseo toda la suerte del mundo: 

"Hola Oli!!
En La Fe nueva tienen servicio de biblioteca y a que no sabes? El miercoles por la mañana escuchó unas risas y cuando me asomé... era la bibliotecaria con un carrito lleno de libros que iba repartiendo por las habitaciones; al verla me fue inevitable acordarme de tu Delicias y secretos en Manhattan y de ti, por supuesto." 
Bibliotecaria de hospital con su carro de los libros. Estados Unidos, sobre 1940.


Es cierto, en mi última novela, DELICIAS Y SECRETOS EN MANHATTAN, hago un pequeño homenaje a las Bibliotecas Hospitalarias a través del personaje de Stella que, con su presencia empujando el carrito de los libros, ayuda a pasar el mal trago a quienes se ven postrados en la cama de un hospital.

"Le encantaba escoger cada mañana un surtido de libros para su carro y comprobar que acertaba en los gustos de sus lectores. Salvo con los enfermos cuyas dolencias requerían una larga estancia, con el resto su trato era breve, pero no por ello menos entrañable. Tal vez a causa de lo vulnerables que las personas se sienten ante la enfermedad, en el hospital las relaciones se estrechaban mucho más que en cualquier otro entorno." DELICIAS Y SECRETOS EN MANHATTAN, capítulo 2.

Hoy también aparece en el Diario EUROPASUR la noticia del acto de agradecimiento público por parte del alcalde de Tarifa a ADARDE-Asociación de Autoras Románticas de España, a la que pertenezco desde su fundación, por haber donado libros de varias de sus asociadas con destino a los fondos de la Biblioteca Municipal de esa localidad. La idea se la debemos a la escritora tarifeña Lucinda Gray, y personalmente me llena de orgullo saber que un ejemplar de DELICIAS Y SECRETOS EN MANHATTAN forma parte de esa donación.
Es emocionante ver que la noticia aparece también en la portada del Diario TARIFA AL DÍA, cuando somos también las escritoras quienes debemos estar agradecidas a la Biblioteca de Tarifa por su apoyo y labor de difusión del género romántico.

Con motivo del segundo aniversario de ADARDE, elaboramos un listado que incluye todas las bliotecas publicas que cuentan con novelas románticas de las asociadas. Si hace años era rarísimo encontrar narrativa romántica en las bibliotecas y algo excepcional hallar obras de autoras españolas, hoy podemos afirmar que las cosas están cambiando, ya que el listado incluye 302 bibliotecas repartidas por 16 Comunidades Autónomas del Estado Español, 1 ciudad autónoma, 1 en Argentina y en 2 en los Estados Unidos.
En este enlace podéis acceder al listado ordenado por provincias. Al lado de cada biblioteca, encontraréis el nombre de las escritoras de las que existen novelas a disposición de los lectores. Recordad que los datos están extraídos a fecha noviembre-2011 y pueden variar, ya que los catálogos bibliotecarios están en proceso de actualización constante.

Por último, os dejo el enlace al portal de las Bibliotecas Municipales de la ciudad de Valencia, donde encontraréis información puntual sobre novedades literarias, consejos del bibliotecario, recomendaciones de los lectores, actividades culturales, animación lectora y noticias sobre el sector del libro. En cualquier caso, no dudes en pedir consejo a tu bibliotecario o librero que son quienes más saben de libros. Como véis, se puede disfrutar del placer de la lectura sin gastar dinero. Por supuesto, novelas románticas también.

martes, 27 de diciembre de 2011

Bela Marbel presentó ESPIRALES EN EL OMBLIGO. La crónica.

¡Por fin os traigo las fotos! Voy a resumir el fin de semana gastronómico-literario con una palabra: magnífico. El viernes 16 de diciembre, a eso de las 20.00 h, tuve el gusto de acompañar a Bela Marbel en la presentación de su primera novela, ESPIRALES EN EL OMBLIGO (Éride Ediciones).

El acto fue divertido y entrañable, gracias a la estupenda acogida por parte de la sala Clan Cabaret de Alicante. Y el ágape con que nos deleitó el Restaurante El Cigró, una delicia.

La presentación transcurrió como una charla tú a tú a través de la cual la autora nos reveló un montón de anécdotas sobre la novela y sobre otros proyectos que tiene entre manos. Sin nervios y con mucha sencillez, entre otras cosas porque, gracias a los focos, desde el escenario apenas veíamos al público.

He de decir que ESPIRALES EN EL OMBLIGO me ha encantado, sobre todo, por la admirable habilidad literaria de Bela Marbel para construir diálogos. Los enfrentamientos dialécticos entre sus dos protagonistas son dignos de recordar. A destacar también la originalidad del argumento: ésta es la primera novela romántica ambientada en la ciudad de Alicante. Con pinceladas aquí y allá, la autora nos regala guiños que hacen referencia tanto a las costumbres de estas tierras como al propio género romántico.
A través de una prosa ágil y exenta de ornamentos de relleno, Bela logra atraparnos en la trama que narra la complicada historia de amor entre Marc, un tejano dispuesto a todo por lograr el amor, y Ana, una alicantina que se aferra al pasado, impidiéndose a sí misma la oportunidad de volver a ser feliz.
Un libro de los que me gusta leer: con una historia intensa donde el deseo se palpa en cada página y que acabaréis con una sonrisa.

Como podéis ver en las fotos, la presentación fue un éxito de público y amigos que quisieron arropar a Bela Marbel en el debut de su carrera literaria.

Yo aproveché el viaje para disfrutar de un par de días en "mi adorada ciudad de los rascacielos". Así que el fin de semana continuó con un paseo por la ciudad vieja de Altea, una exquisita comida en el Ristorante La Gioconda y una sobremesa de aquí para allá que duró... ¡hasta las nueve de la noche!

La combinación de gastronomía y literatura es mi preferida. Si además es romántica, mejor que mejor. ¡Volví de Alicante deseando repetir!

Página ESPIRALES EN EL OMBLIGO, sinopsis, biografía de la autora y venta on line.
Blog de Bela Marbel EL AMOR Y OTRAS PSICOPATÍAS

lunes, 26 de diciembre de 2011

ILUSIONARIA, un regalo solidario

Estos días en que las compras ocupan gran parte de nuestro tiempo, os propongo un regalo solidario. ILUSIONARIA es una antología de cuentos infantiles de carácter benérfico en la que 20 escritores y 20 ilustradores (coordinados por el escritor Juande Garduño) hemos aportado nuestro granito de arena para que la Asociación Matrioska Fons Mellaria pueda seguir trayendo niños de la zona donde ocurrió el desastre de Chernobil.

Varias familias españolas los acogen durante casi tres meses al año, les abren las puertas de su casa, los visten y les dan todo su cariño. Con ello consiguen que mejore su salud y paliar los efectos cancerígenos de la radiación.
Todos nosotros estamos orgullosos de haber aportado nuestro trabajo desinteresado en esta antología de cuentos infantiles. El libro ha quedado precioso gracias al diseño y las magníficas ilustraciones que llenan sus páginas.
Os dejo un pequeño avance. Mi cuento se titula LA FUNCIÓN DE NAVIDAD, está ilustrado por la magnífica dibujante Mónica Ruiz Losa y empieza así:

"Algunos no me conocéis. Me llamo Marcos, tengo diez años y mi piel es de color marrón..."

Marcos, por Mónica Ruiz Losa. Esta ilustración es una
primicia, ya que no se incluyó en la antología por falta de espacio.

¿Quieres saber por qué Marcos está tan cansado de representar siempre el mismo papel en la función de Navidad de su colegio y cómo consiguió que este año cambiasen las cosas...? ¡Ah, pues trendrás que leerlo!


LA FUNCIÓN DE NAVIDAD, ilustración de Mónica Ruiz Losa.
Me encanta la ovejita con gafas, es mi personaje preferido.

Para adquirir tus ejemplares, entra en el blog de la antología y sigue las instrucciones. Sólo cuesta 15 euros. El pago se realiza mediante transferencia a la cuenta de Matrioska Fons Mellaria, luego sólo tienes que enviar un email con tus datos y en unos días tendrás tus libros en casa. Así de sencillo.
Anímate, escoge ILUSIONARIA como regalo navideño y tendrás la satisfacción de saber que con ese gesto estás dando vida.

viernes, 23 de diciembre de 2011

¡FELIZ NAVIDAD!

Hace ya dos años celebré mi primera Navidad blogera con un relato inspirado en uno de mis cuentos navideños preferidos. Charles Dickens nos regaló en 1843 A Christmas Carol, una joya intemporal que ha hecho soñar a generaciones.
Entonces dejé volar la imaginación para recrear el futuro de dos personajes entrañables que son un símbolo de renacimiento y esperanza: Ebenezer Scrooge y del pequeño Tiny Tim Cratchit.
Y ahora que lo releo, veo repeticiones, errores... pero de los los fallos se extrae la experiencia. Por ello, no voy a cambiar ni una letra. Quiero que mi modesto homenaje a esa maravillosa historia, con la redacción algo torpe de una escritora que empieza, se convierta en una tradición con la que, año tras año, os desearé una Feliz Navidad y un año venidero cargado de alegrías y sueños cumplidos. Que así sea.

"ALGUNAS NAVIDADES DESPUÉS...", por Olivia Ardey©

Scrooge estaba vivo, para empezar.
Y más feliz que nunca aquella tarde de Navidad. Sentado frente a la chimenea, sacudió el recipiente en el que calentaba granos de maíz y sonrió satisfecho. Gracias a aquella terrorífica noche tan lejana, supo combatir el futuro funesto que vaticinaban las visiones mostradas ante sus ojos por el tercer fantasma. ¡Bendita Navidad aquella!, porque a partir de entonces había gozado de la vida como de un regalo del destino, dichoso e inesperado.
—¿Cuándo estarán las palomitas, tío Eb? ¡Tardan mucho! —protestó el pequeño de ojos claros que tenía sentado en el regazo.
El maíz empezó a crepitar en el interior del recipiente de rejilla metálica.
—Un momento, pequeños —advirtió—. No seáis impacientes…
Los niños que se arremolinaban a su alrededor comenzaron a dar palmas, ansioso por saborear las deliciosas palomitas recién sacadas del fuego.
Hacía años que el viejo Ebenezer se había mudado de su enorme y vacía mansión para vivir en casa de su sobrino Fred, convirtiéndose así en un verdadero abuelo para sus cuatro sobrinos nietos. En ese momento se encontraba rodeado por un total de diez pequeños de todos los tamaños y edades. La casa de Fred se llenaba de amigos y parientes cada Navidad y Scrooge era feliz ejerciendo de niñero improvisado.
—¡Con cuidado! Si os arrimáis demasiado, podríais quemaros —rogó.
Una niña le acercó un bol enorme. Scrooge destapó el recipiente de hierro, pero mientras lo inclinaba estallaron un par de granos. Las palomita saltaron por los aires y los niños chillaron ante aquella inesperada tormenta de nieve, mientras el anciano reía con ganas.
—A veces pienso que eres más niño que ellos —dijo una voz a su espalda.
Scrooge miró por encima del hombro; Timothy Cratchit, lo estudiaba muy serio con las manos a la espalda. El anciano se encogió de hombros, y con una agilidad impropia de su edad, agarró el bastón y se puso en pie mientras los niños andaban a la caza de las palomitas esparcidas por la alfombra.
—La vida es muy corta, Tim; tienes que aprender a disfrutar de ella.
Estudió el gesto sombrío de aquél joven, al que quería como a un hijo. El pequeño Tiny Tim, aquél niño enfermizo, se había convertido en un hombre. Un joven alto y apuesto con mucho éxito entre las mujeres. Pero él no solía prestar atención a las miradas seductoras y suspiros femeninos que despertaba a su paso. Parecía que todo su interés se centraba en su trabajo, un puesto importante en la Banca de Londres.
Aunque el viejo Scrooge intuía que el corazón del joven latía en secreto por una mujer; por la pelirroja escocesa de ojos claros y soñadores que en ese momento Timothy contemplaba con una expresión atormentada.
—¿Has hablado con Jane? —preguntó el anciano; Timothy negó con la cabeza—. ¿Dónde está tu valentía? —lo provocó.
—No se trata de eso —replicó sin apartar la vista de la muchacha—. No puedo decirle la verdad. Me odiaría si supiera que la hemos… que yo la he estado engañando.
El joven recalcó las últimas palabras con pesar, en un tono no exento de culpa.
—Algún día tendrás que ser sincero con ella. No permitas que viva engañada. Con ello sólo consigues poner en peligro su felicidad… y la tuya.
Timothy chasqueó la lengua molesto.
Ebenezer Scrooge sacudió la cabeza refunfuñando por lo bajo. Cuando Tim le confesó meses atrás que había accedido a ayudar a su amigo Herman Black, ya le advirtió que aquél asunto no podía acabar bien. Pero él, desoyendo sus consejos, continuó con aquella farsa. El tiempo había demostrado que el que Timothy consideraba su mejor amigo, resultó ser un cobarde. Un irresponsable sin sentido del deber, que no dudó en embarcarse en el puerto de Southampton y huir rumbo a Nueva York en cuanto Jane le comunicó que iba camino de Londres dispuesta a conocerle en persona y formalizar el compromiso.
—Jane tiene un corazón enorme, creo que subestimas su capacidad para perdonar —insistió Scrooge.
—No creo en los milagros —zanjó Timothy dándole la espalda.
Scrooge contempló como el joven se alejaba hacia el otro lado del salón en busca de un grupo de invitados. Al anciano no le pasaron desapercibidas las miradas furtivas que entrecruzaban él y la bella escocesa. La expresión de Timothy reflejaba un tormento interior, con toda seguridad fruto de los remordimientos. En cambio, la mirada tímida de Jane, reflejaba azoramiento y algo que Scrooge no había olvidado: aquellos ojos eran los de una mujer apasionada.
Apoyado en su bastón, estudió a Timothy de arriba abajo recordando a aquél niño enfermizo condenado a una muerte temprana... ¿Y era él quién no creía en los milagros? ¡Qué equivocado estaba! El anciano decidió demostrarle que sólo la magia de la Navidad tiene el poder de convertir en realidad los buenos deseos y hacer posible cualquier milagro.
Al otro lado del salón, Jane escuchaba sin demasiado interés la divertida conversación que mantenía la esposa de Fred con algunas de sus invitadas. Con disimulo miró a Timothy Cratchit; él pareció percibir su escrutinio y giró la cabeza. Sus miradas se encontraron y Jane desvió la vista azorada al notar que empezaba a ruborizarse. Se sentía confusa y arrepentida; se estremecía cada vez que recordaba el cálido placer de los labios de él sobre los suyos… Nunca debió ceder a la tentación de sus besos, y se odiaba a sí misma por su propia debilidad, por haber caído en brazos del mejor amigo de su prometido. Estaba segura de que el señor Cratchit tendría un pésimo concepto de ella por su actitud libertina.
¡Maldito destino! Amaba a Herman Black, pese a haberla abandonado casi a las puertas del altar. Mientras permanecieron separados, él en Londres y ella en Escocia, logró adueñarse de su corazón con decenas de cartas llenas de ternura. La había humillado ante todo Londres y aún así lo amaba.
Pero Timothy Cratchit despertaba en ella un sentimiento desconocido, una atracción que la encendía por dentro. La mortificaban los remordimientos, porque a pesar de amar al hombre equivocado, soñaba con la magia de sus besos.
Con ayuda de su bastón, Scrooge se aproximó hasta Jane y la joven, al verlo llegar, le dedicó una amplia sonrisa. Aquél hombre que durante años cultivó fama de avaro y mezquino, se había convertido en un anciano adorable.
—Estamos en Navidad señorita Jane, es tiempo de alegría. ¿Cuál es la causa de tanta melancolía? Quizá… —sugirió mirando a Timothy.
La joven parpadeó avergonzada; Scrooge la tranquilizó con una sonrisa cómplice.
—Imagino que conoce mi situación—dijo Jane bajando la vista—, se que todo el mundo habla de ello. ¡El señor Cratchit ha sido tan amable conmigo!
—Un gesto de caballerosidad que le honra —aseguró entornando los ojos—. E imagino que se ha esforzado en consolarla.
Jane fijó la vista en sus guantes completamente ruborizada y Scrooge sospechó que las atenciones de Timothy hacia la muchacha habían sido mucho más que de un par de besos inocentes.
—Jane, créame, no debe arrepentirse de nada —aseguró para tranquilizarla—. Y no dedique ni uno de sus pensamientos a ese sujeto miserable. Él no la merecía.
—Olvidar al señor Black no será tan sencillo, señor Scrooge —murmuró con un suspiro.
—¡Si apenas se conocían! —refunfuñó.
—Se equivoca. Su comportamiento ha sido imperdonable, pero nunca podré olvidar todas y cada una de las palabras que me escribió en sus cartas.
—Es usted muy joven Jane —añadió—, y tan inocente… ¿Usted cree que de haber sentido todo el amor que le expresaba en esas cartas habría huido de usted?
La joven alzó el rostro angustiada; empezaba a sospechar que había sido víctima de un engaño.
—¿Qué quiere decir? ¿Cree que me mintió todo el tiempo?
—Tal vez —aventuró rascándose la barbilla—. Juraría que esas cartas las escribió otra mano…
Jane apretó los labios para ahogar un sollozo. Notó que se los ojos se le llenaban de lágrimas y murmurando una breve disculpa se alejó a toda prisa. Scrooge se sintió culpable al verla abandonar precipitadamente la estancia por una de las puertas de salida al balcón. Pero a pesar de ello, esbozó una sonrisa triunfal cuando vio que Timothy corría tras ella con semblante desolado. «Y ahora, a esperar que suceda el milagro», pensó mirando hacia el balcón con picardía.
Jane trataba de serenarse con ambas manos apoyadas en la balaustrada del balcón. Cuando oyó que la puerta se abría a su espalda, giró la cabeza y se secó las lágrimas a toda prisa a fin de mantener la compostura.
—Señor Cratchit…
—Señorita McRee, permítame —murmuró quitándose la chaqueta para cubrirle los hombros—. Quiero que sepa que abomino del comportamiento imperdonable de Herman Black.
—Gracias —susurró ella en voz baja—. El primo Fred ha sido tan amable brindándome su hospitalidad. Comprenda lo bochornoso que sería para mí regresar a Escocia y…
—Señorita… ¡Oh, Jane! Esto es absurdo —protestó con un suspiro de impotencia—. No podemos guardar las formas de este modo después de todo lo que hemos compartido… —susurró abrazándola por detrás.
—No… no estuvo bien —titubeó arrepentida.
—Cada vez que pienso lo que estás sufriendo por culpa de ese desalmado… sería capaz de matarlo con mis propias manos —masculló con ira contenida.
Notó que se ella se agitaba por los sollozos, y haciéndola girar entre sus brazos, la abrazó con fuerza. Jane recostó la cabeza sobre su pecho sin poder contener el llanto.
—Jane, permite que cuide de ti —murmuró apoyando la mejilla en su cabeza—. Me atormenta pensar que no sientes nada por mí, que todo tu amor pertenece a Black. Pero me conformaré con lo que estés dispuesta a darme. Por favor, cásate conmigo y me harás el hombre más feliz de la tierra.
—No puedo —sollozó—. No sería justo.
—No te pido que me ames.
—No lo entiendes —le explicó más serena.
Timothy sacó un pañuelo de su bolsillo y le secó las lágrimas con delicadeza. Ella alzó el rostro para mirarle a los ojos.
—Acabo de descubrir que he sido víctima de una broma abominable por parte de ese hombre y de alguien que se prestó a colaborar en el engaño. Ahora tengo la certeza de que no fueron suyas ni una sola de las palabras que lograron conquistar mi corazón.
—Jane, debes saber…
—No sería justo para ti que aceptara ser tu esposa, cuando estoy enamorada de un desconocido que me dedicó las cartas más maravillosas que una mujer pueda soñar.
Timothy se quedó sin aire, la abrazó con muchísima fuerza; Jane podía sentir los latidos acelerados de su corazón en su mejilla.
—Jane, ¿estás segura de amar a ese hombre?
—Con todo mi corazón —sollozó de nuevo.
—¿Tanto como para perdonar? —ella alzó el rostro y lo miró perpleja; él respiró hondo antes de continuar—. ¿Y si ese hombre no hubiese mentido? ¿Si todo lo que decían las cartas fuera cierto?
Jane le tapó la mano con la boca para impedir que continuara hablando. Durante unos segundos se olvidó hasta de respirar; no podía apartar sus ojos de los de él. Retiró la mano de su boca y acarició su mejilla.
—Si todo lo que decían las cartas era verdad —logró decir por fin—; no se trataría de un engaño. ¿Tú…? —él asintió en silencio, y ella exhaló todo el aire contenido en sus pulmones—. ¡Debería abofetearte!
Pero en lugar de cumplir con su amenaza, se abrazó muy fuerte a él, escondió el rostro en su pecho y comenzó a reír con suavidad.
—Jane, Herman nunca ha sido un hombre paciente —le explicó—. Me rogó que le ayudara a redactar las cartas que te enviaba con la excusa de que no sabía cómo cortejar a una mujer. Supongo que al principio le pareció divertida la idea de la seducción, pero nunca estuvo dispuesto a asumir un compromiso.
—Maldito embustero —masculló furiosa, pero extrañamente feliz— y maldito tú también.
—Lo que empezó como un juego, pronto se convirtió en algo demasiado serio para mí. Ansiaba recibir tus cartas y lo único que me mantenía cuerdo era poder compartir contigo todo lo que tengo aquí dentro —dijo llevándose la mano de ella a su pecho—. Cuando llegaste de Escocia sólo podía pensar en tenerte aunque fuera una vez, en besarte hasta robarte el aliento, en acariciarte una y mil veces.
—¿Y no se te ocurrió pensar cuánto sufría yo? ¡Me atormentaban los remordimientos!
—¿Por qué? —preguntó sinceramente sorprendido.
—Acababa de romper mi compromiso —alegó incómoda—. Y desde la primera vez que te vi, la pasión se impuso a mi voluntad y me dejé dominar por el deseo —confesó en voz baja—, con un descaro que escandalizaría...
Él le tomó la barbilla y la miró a los ojos.
—¿Deseo? —preguntó en tono íntimo.
Ella asintió con la cabeza. Timothy la atrajo por la nuca y se apoderó de su boca abriéndole los labios con codicia, buscando la caricia de seda de su lengua, loco por saciarse de ella, de su sabor. Cuando por fin se separaron, se miraron a los ojos con la respiración agitada y él apoyó su frente en la de ella.
—¿Seguro que todo en esas cartas era cierto? —preguntó Jane.
—Cada palabra.
—Dicen que los ingleses prefieren a las mujeres de cabellos oscuros —dijo dudosa—. ¿Es cierto que adoras…?
—¿Tus «rizos de fuego»? —recordó con media sonrisa lo que había escrito en una de las cartas.
—¿Y las pecas sobre mi nariz?
—«Polvo de estrellas» —recordó también en voz baja—. Y ahora, dime que te casarás conmigo.
—Sí —susurró.
Ella le rodeó el cuello con los brazos para devorarse con un beso largo y sensual.
—Puedo oír tu corazón —dijo Jane acariciando su pecho.
—«En mi interior un volcán» —recordó Tim de nuevo las cartas besándola en el cuello.
—«Y yo lava pegada a ti» —continuó ella, cada vez más osada.
—¿A quién amas, Jane? —le mordisqueó la mandíbula.
—A ti.
La boca de él inició un sensual recorrido a lo largo de su cuello.
—Porque yo te amo con desesperación —confesó sin dejar de besarla y notó que ella se estremecía entre sus brazos—. «Siempre mía, Jane» —murmuró buscando su boca—, «yo dentro de ti y tú…»
—«…para siempre en tus brazos prisionera» —susurró en sus labios antes fundirse en el más apasionado de los besos.


jueves, 22 de diciembre de 2011

El género romántico estuvo presente en las JORNADAS FANTASTI'CS


Hoy os traigo las fotos y un resumen de la Jornada de Novela Romántica, Gótica y Paranormal que tuvo lugar dentro de los actos de FANTASTI'CS, semana dedicada a la narrativa fantástica, de terror y ciencia ficción, que se celebraron en noviembre en la Librería Argot de Castellón.

Jornadas en las que también se presentó la antología fantástica EL DÍA DE LOS CINCO REYES Y OTROS CUENTOS, que incluye mi micro-relato LÁGRIMAS DE SANGRE.

Durante la mañana, la escritora Yolanda Quiralte, como coordinadora y anfitriona, presentó a Amaya Felices que habló de la novela gótica. Después, Jezz Burning, autora de la Saga Licos, habló de la novela paranormal.

Las charlas se simultanearon con un pase de booktrailers de las novelas de las escritoras participantes.

Tras comer en el Ristorante Capri, que nos ofreció una exquisita degustación de raviolis creativos, regresamos a Argot para continuar con la Jornada.

Por la tarde, hubo una mesa redonda en torno a la novela rómántica, en la que participamos varias escritoras, moderadas por Yolanda Quiralte.

Lucía de Vicente habló muy a fondo sobre la novela contemporánea, Jezz Burning hizo un recorrido por el género desde sus inicios hasta hoy, Amaya Felices explicó que es el ci-fi (novela de ciencia ficción urbana) y su incipiente implantación dentro del género romántico, sobre todo en narrativa juvenil, Chus Nevado habló de las novelas románticas protagonizadas por escoceses.

Y yo hablé de la narrativa corta romántica, como pionera del género y su evolución hasta hoy; para ilustrar la charla, llevé ejemplares de mi propia colección de lo que es un folletín, novela por entregas, pulp ficcion o novelas de kiosco desde 1930 hasta 1990.

A continuación, Lucía de Vicente y yo presentamos nuestras nuevas novelas: CUANDO PASE LA TORMENTA y DELICIAS Y SECRETOS EN MANHATTAN para finalizar con la firma de ejemplares que tuve la alegría de compartir con mis primas, mi tía y algunos de mis sobrinos de Castellón.

En definitiva, una jornada completísima y muy enriquecedora que estamos deseando repetir.

lunes, 19 de diciembre de 2011

DELICIAS Y SECRETOS EN MANHATTAN como lectura recomendada


Estoy más que contenta, porque estos días en que los libros son el regalo perfecto y las fiestas nos permiten dedicar más tiempo a la lectura, son nada menos que cuatro los sitios web los que recomiendan DELICIAS Y SECRETOS EN MANHATTAN.


Qué razón tiene la escritora Teresa Cameselle cuando dice que no hay mejor regalo que un libro; ella escoge, de entre muchísimas, mi novela como sugerencia para regalar estas Navidades.

Autoras en la Sombra, la web literaria especializada en narrativa romántica la incluye también entre sus recomendaciones navideñas.

En tiempos de crisis, no está de más recordar que el placer de leer no requiere gastar dinero, puesto que las bibliotecas públicas son un servicio gratuito. Y dado que aún hay quien piensa que la narrativa romántica es un género menor, me ha hecho especial ilusión ver que son dos los espacios literarios que también recomiendan DELICIAS Y SECRETOS EN MANHATTAN

La Red de Bibliotecas Públicas de Valencia la incluyen en su sección "El bibliotecario recomienda"

Y la Biblioteca del Perelló también la considera una lectura a destacar, incluyendo una estupenda reseña en su blog.

Dos años después... DAMA DE TRÉBOLES

No tengo la costumbre de incluir reseñas de mis novelas en las entradas, porque en el blog ya abrí una sección donde se recogen las críticas y opiniones que me van llegando (en la columna derecha, pinchando sobre la sonriente pin up que teclea). Pero esta vez hago una excepción. Porque excepcional es que DAMA DE TRÉBOLES siga llegando al corazón de muchas personas cuando han pasado ya dos años de su publicación.


Si tenéis curiosidad, no os perdáis la magnífica reseña que aparece en el blog literario Lágrimas de Cristal.
Hoy día en que los libros parece que se publican con una vida estimada de cuatro meses a lo sumo, como objetos de consumo rápido para leer y olvidar, me emociona comprobar que mi primera novela, después de tantísimo tiempo, continúa suscitando opiniones tan bonitas por parte de los lectores.

domingo, 18 de diciembre de 2011

DELICIAS Y SECRETOS EN MANHATTAN, cita escogida en diciembre

El blog LA VIDA SECRETA DE LOS LIBROS acaba de darme una maravillosa sorpresa ya que, como primera cita literaria escogida para el mes de diciembre, ha extraído una de mi novela DELICIAS Y SECRETOS EN MANHATTAN. Es ésta:

—Gracias por escucharme —dijo, mirándola a los ojos.
—Si no has dicho una palabra.
—Has escuchado mi silencio, poca gente sabe hacer eso.

DELICIAS Y SECRETOS EN MANHATTAN, capítulo 5


Cita que, además, ha generado un interesante debate en relación a la importancia de saber escuchar y, sobre todo, de saber dar nuestro apoyo silencioso a quien nos necesita.
Mi opinión está en el texto. Yo creo que, en los momentos importantes, el silencio dice más que cualquier palabra.

jueves, 15 de diciembre de 2011

Este Viernes... ¡nos vemos en Alicante!

Mañana viernes 16 de diciembre viajo por mi ruta preferida, caminito hacia el sur de estas tierras, porque Bela Marbel ha tenido el detallazo de invitarme a acompañarla en la presentación de ESPIRALES EN EL OMBLIGO (Éride Ediciones).

Bela es una mujer cercana, sencilla y muy divertida, que nos sorprende con un debut literario absolutamente original, ya que ESPIRALES EN EL OMBLIGO es la primera novela romántica erótica cuya trama transcurre en la ciudad de Alicante.
Para ir abriendo boca, pincha en el enlace donde puedes leer la sinopsis y visita el blog de la autora El amor y otras psicopatías.
Y no lo olvidéis:

VIERNES, 16 de diciembre
A las 20.00 h
SALA CLAN CABARET (C/ Capitán Segarra, 16  ALICANTE)


¡Os esperamos!

martes, 13 de diciembre de 2011

Megan Maxwell en Valencia. La crónica.

Hace días que quería subir las fotos al blog. Por fin Megan Maxwell vino a Valencia a presentarnos LAS RANAS TAMBIÉN SE ENAMORAN (Ed. Versátil).
Pues sirva esta crónica para celebrar que la novela ya va por la 5ª edición y que ha sido galardonada con el Premio Dama 2011 a la mejor novela chick-lit.  ¡¡¡Enhorabuena, Megan!!! Aprovecho para felicitar a nuestras compañeras Lena Valenti y Angeles Ibirika que también han sido distinguidas en esta III Edición de los PREMIOS DAMA, que anualmente convoca Club Romántica.

Consuelo Olaya, Megan Maxwell y Olivia Ardey en la Casa del Libro (Valencia)

Como ya os adelanté, la presentación tuvo lugar el pasado 29 de noviembre en la Casa del Libro del Paseo de Ruzafa.


Yo tuve el honor de ejercer de anfitriona junto a Consuelo Olaya, editora de Versátil. Un encanto de mujer que nos cautivó a todos con su simpatía y sencillez.

Entre los asistentes, Anabel Botella, Ana María Carrión, Bela Marbel,
Judit Blasco, Alba Martínez, Stella Gómez...

Fue una charla informal en la que hablamos de todo un poco. Megan nos contó los entresijos de su quehacer como escritora, su afán de superación, su tesón y las alegrías que esa inmensa fe en sí misma le deparan tras años de lucha.

Olivia, Megan y Consuelo

Entre risas y anécdotas, conocimos un poco más a la mujer que nos deleita con sus historias de amor en clave de comedia romántica y al final acabamos brindando con cava.



Brindis por la autora y sus éxitos

Las chicas posando para el recuerdo

¡¡¡Bien por nosotras y por Megan!!!

Salta a la vista que lo pasamos fenomenal, no hay más que vernos en las fotos. Gracias a todas las personas que nos acompañaron esa tarde y en especial a Megan Maxwell porque es una escritora que va repartiendo alegría por donde pisa.