A principios de 2010, la escritora Rosario Raro me regaló un trébol de cuatro hojas. Lo había cultivado ella misma a partir de unas semillas. El detalle me conmovió, aunque le recordé a Rosario que el shamrock tiene tres hojas. Entonces nos reímos y ella me aseguró que éste en concreto me traería buena suerte, porque era una muestra de amistad, de las que se dan de corazón. Confieso que soy de naturaleza escéptica y no creo en sortilegios ni esos poderes sobrenaturales que se suelen atribuir a los objetos. Pero haberlas, hailas... a las pruebas me remito.
Durante año y medio he tenido a la vista ese trébol. Y día a día, para mi sorpresa, he ido viendo cómo desaparecía una de las hojas. Es un misterio porque nadie lo ha tocado, ya que está enmarcado entre dos cristales, pero como podéis comprobar, aquel trébol de cuatro hojas se ha transformado por arte de magia en mi auténtico shamrock de la suerte.
Estos días en que apunto está de ver la luz mi nueva novela DELICIAS Y SECRETOS EN MANHATTAN, otra gran escritora y querida amiga, Lydia Leyte, tuvo el detallazo de regalarme un amuleto de Sargadelos; un CORNABERTO, "contra los que nos quieren acornar, fingiendo no enterarse". O lo que es lo mismo: contra la puñalada trapera, contra el que tira la piedra y esconde la mano, contra el que nos pone verde a nuestras espaldas o -ay, esas nuevas tecnologías- contra el que nos quiere hacer daño parapetándose detrás de un nik.
Date un paseo por la página de la escritora ROSARIO RARO.
Te invito a conocer la obra de LYDIA LEYTE.
Vaya, no sólo me ha hecho reír sino que me ha conmovido tu historia. Es maravillosa. Qué buena amistad, y qué hermosa anécdota (curiosa también) la del trébol O_o
ResponderEliminarBesotes afortunados.
Toda leyenda viene de algún lugar, y en cada pequeña cosa siempre existe un poquito de magia... como dicen en mi tierra... Meigas, habelas hailas...
ResponderEliminarBesos
Kelly, Babel, el poder de un amuleto no es otro que la amistad de quien nos lo regala. Un beso a cada una y gracias por visitar mi casa virtual.
ResponderEliminarSolo creo en un tipo de amuleto, el de la entrega plena de amor y amistad hacia todas esas personas que queremos y nos quieren. Gracias por tus palabras, por estar siempre ahí, dándome tu apoyo. Lydia Leyte
ResponderEliminarLo que cuentas del trébol que te regaló tu amiga si que es curioso, algo de buena magia tendrá ;)
ResponderEliminarEspero que ambos amuletos te sigan dando suerte.
Besitos!
Esos amuletos son la muestra del cariño que te mereces. Besitos. Yo no creo amuletos pero por si acaso...
ResponderEliminarAreira, tu cornaberto me acompañe!!!!
ResponderEliminarDama, ya lo creo que es curioso. Es que parece magia, así que algo debe haber de mágico en el shamrock.
Bela, lo que yo digo, por si acaso...
Un beso y gracias por la visita.